miércoles, 9 de junio de 2010

La búsqueda del río de oro

Por: Ever Alexander Santana
12 años
Pailitas


Un grupo de expedicioncitas emprendieron su camino en busca del río de oro, lo que ellos no sabían que el camino era tortuoso y muy peligroso. Cuando habían caminado un trayecto largo, se encontraron con un guacamayo enorme, de cola de color rojo y con un pico muy afilado, se paró en el camino con intención de devorarnos a todos, pero Everton, el líder del grupo, sacó de la olla que llevaba con su amigo Obancer, su espada cuchara y se la introdujo al enorme guacamayo en la barriga y lo mató. Superada la primera batalla, el temible Everton con sus amigos prosiguieron el camino en busca del tesoro, el río de oro, de pronto se escucharon unos latidos de perro y al acercarnos vimos un perro de cinco metros de alto y dos de ancho y mis amigos Fashelia y Chefri , intentaron matarlo pero fue imposible, entonces mi amigo Obancer sacó la escuadra tapa mágica y se la metió en la boca al osado animal y cayó muerto al instante, haciendo semejante ruido al caer al suelo.


Al llegar al río, encontraron un duende llamado, Josué Armando, quien nos advirtió que si sacábamos el oro del río, íbamos a sufrir una desgracia, nosotros no hicimos caso a las advertencias del duende y de una patada voladora lo mandamos a Marte, mis amigos al ver tanto oro en el río, se llenaron los bolsos del metal precioso pero, ¡oh, sorpresa!, todo el que se untaba las manos de oro se iba convirtiendo en pescadito, muy asustado solté la escuadraescopeta y le dije al director del taller, “ profe, profe, regresemos, esto no me está gustando”.



Aguas cristalinas

Por: Greisi Paola Guarín León.
12 años
Pailitas


En cierto día una niña llamada Cristal, se fue de paseo para la quebrada con un grupo de amigos y algunos padres de familia. Mientras la niña se estaba bañando, observó una claridad en una parte de la quebrada, era una agua cristalina y muy hermosa y quedó sorprendida al ver semejante espectáculo, enseguida llamó a su mamá y le contó lo que estaba sucediendo, la madre en medio de la sorpresa, se atrevió a beber de esa agua y la sintió tan dulce y rica que invitó a cristal a beber el agua, ésta bebió y la encontró tan deliciosa que, llamó a sus amigos a que probaran el agua, sus amigos bebieron y la encontraron tan rica que , fueron al pueblo y le contaron a algunos habitantes que en un pozo de la quebrada de Pailitas, había agua cristalina y muy deliciosa, éstos bajaron rápidamente y comprobaron que era cierto, los habitantes de Pailitas le contaron a los del burro y estos bebieron de esa agua cristalina y dulce, los habitantes del burro le contaron a los de Palestina y éstos a los de Tamalameque y cuentan que desde entonces, los colombianos y extranjeros, llegan a Pailitas a beber de esa agua tan mágica. Algunos le dan poder curativo, pues cuentan que han llegado personas enfermas y al beber del agua, quedan curado. Al pozo lo bautizaron como “LAS AGUAS CRISTALINAS”, en honor a su descubridora, la tierna niña “Cristal”.

La guacamaya de colores brillantes

Por: Marcia Pineda Pérez.
11 Años
Pailitas.



En una finca del pueblo de Pailitas, llamada “La estrella”, había un árbol muy hermoso, éste servía como casa de un grupo de guacamayas de colores muy vistosos, pero un día bastante soleado llegó al árbol una guacamaya muy hermosa y con colores muy brillantes, ésta se posó en el árbol y saludó a sus compañeras, las cuales respondieron el saludo a regaña dientes o mejor dicho a regaña pico, las guacamayas sentían envidia por la nueva huésped ya que lucí muy hermosa y sus vistosos colores sobresalían al calentar el sol. Una vez la guacamaya salió a dar un paseo y se encontró con un perro y se pusieron a charlar y le dijo que se sentía muy mal porque sus amigas no gustaban de ella por sus colores y que era presa de la envidia de las demás guacamayas. El perro le dijo no te sientas mal por eso, tú no tienes la culpa de ser tan bonita, ya verás que dentro de poco tiempo tus compañeras te aceptaran en el grupo.


El perro corrió al árbol en donde se encontraban las demás guacamayas y se puso hablar con ellas, les dijo que no sintieran envidia de la guacamaya de colores brillantes, que ella era muy buena y que no se fijaran en lo que se lleva por fuera sino de lo que uno lleva por dentro, el perro volvió a su casa, más tarde la guacamaya de colores brillantes volvió al árbol y con grata sorpresa vio que sus compañeras la recibieron muy bien con amabilidad y aplausos. Desde entonces se convirtieron en grandes amigas, la envidia quedó atrás y una vez más se pudo comprobar que, “ las apariencias engañan”.

Los zapatos de moda

Tatiana Tamis
12 años
Tamalameque


En la oscuridad de la noche, corrían los ratones de un lado al otro, parecían monstruos deformes; Yaneth, que sufría de nictofobia, temblaba de miedo en las tinieblas de la noche; un ratón la tocó… iban pasando las horas, de pronto de manera inesperada algo se acerca a ella:


Una mujer esquelética, con la cara llena de insectos y unos zapatos que en esa época estaban de moda, como Yaneth quería todo lo de moda, se lleno de valor y de un solo brinco le quitó los zapatos a la señora, Salió corriendo a la pieza de su madre y gritando en voz alta decía: ¡los tengo! ¡Los tengo! Y su mamá asustada se levantó y calmó a la niña. Yaneth se calmó y le contó todo a su mamá, y le prometió que no volvería a salir de la pieza en la noche y todos los días recuerda esa noche de la que pasó del miedo al valor

Las frutas son buenas para la salud. ¡No lo olvides!

Por: KAREN TATIANA TAMI GALVIS

12 AÑOS

En una época del año, fueron convocadas a una asamblea todas las frutas porque se había presentado una epidemia.

Tarzan que era el jefe de la selva dijo:

¡Ustedes! Los he reunido porque le están haciendo daño a la gente por ejemplo:

AGUACATE: Tú con ese color verde y esa Pepa grande haces mal al estómago…. ¡yo no hago mal porque tengo vitamina D, quien hace mal es el banano

BANANO: Yo no hago mal porque ayudo a normalizar el intestino… la que hace mal es la cereza

CEREZA: Yo no hago mal porque brindo la vitamina B y C… el que hace mal es el coco

COCO: Yo no hago mal porque ayudo a recuperar la piel… el que hace mal es el durazno

DURAZNO: Yo no hago mal porque ayudo a dar los glóbulos rojos… el que hace mal es la fresa

FRESA: Yo no hago daño porque doy la vitamina D y hago que las personas se vean bonitas… el que hace mal es la uva

UVA: ninguna hacemos daño, dice la uva, porque somos necesarias para todas las personas y a cambio damos muchas vitaminas, para que crezcan saludables y sanos con muchas vitaminas y minerales

En el lugar de la muerte

Por: Said Moreno Vega

14 Años
Tamalameue

PERSONAJES:

MUERTE: quien intenta llevarse al sepulturero
SEPULTURERO: quien pelea con la muerte
BEATA: mujer que viene de la iglesia y enfrenta a la muerte
LUGAR: cementerio, lugar sagrado para los muertos

Entra la muerte al cementerio, el sepulturero y cuidandero del cementerio la sorprende:
SEPULTURERO: (contándole a la muerte), buscas algún vivo para matarlo?
MUERTE: ¡yo no busco ningún vivo para matarlo, te busco a ti!
SEPULTURERO: (muy asustado, respirando desesperadamente) ¡a mí! Habiendo tantas personas para que te las lleves? Si me llevas a mi no va haber quien entierre a las personas y quien cuide el cementerio

En medio del diálogo aparece una mujer devota al señor, vestida con un velo negro y un vestido blanco, acababa de salir de la iglesia e iba a visitar a sus familiares fallecidos. Cuando vio hablando al sepulturero con la muerte se asusta y se hace la señal de la cruz

BEATA: atrás demonio! En nombre del señor encomiendo mi espíritu y el de este pobre que no sabe lo que hace ¿cómo se les ocurre que la muerte va a estar hablando con una persona?

SEPULTURERO: estamos hablando porque ella dijo que me iba a llevar y lo único que estamos haciendo es hablar

MUERTE: yo hago lo que quiera en mi hogar, este es el hogar de la muerte.

BEATA: hasta donde yo tengo entendido esta es la casa de los muertos, le pertenece a Dios, porque el cuerpo de una persona pertenece en cuerpo y alma a Dios por ser su creador

MUERTE: (con una risa macabra), no me digas Beata, esto es y siempre será mío y no tienes derecho a hablarme así, quien le hable mal a la muerte le va muy mal: ¡quieres morir! El sepulturero se le enfrenta a la muerte y le grita.

SEPULTURERO: (dirigiéndose a la muerte y gritándole), no te permito que le hables así a una señora que solo defiende el bienestar del señor

MUERTE: (enfurecida tomó la hoz que llevaba y apuntó al sepulturero) no me trates así, quien trate mal a la muerte se irá con la muerte, el sepulturero y la señora se asustan y el sepulturero sale corriendo, la señora se queda sola y le grita al hombre ¡cobarde! ¡Cobarde! Nunca había visto a alguien así.

Entonces la señora se pone a rezar el padre nuestro y la muerte desapareció porque la oración del señor pudo más que la muerte

Por: Said Moreno Vega

14 Años
Tamalameue